La educación plástica y visual



La Educación Plástica y Visual constituye una materia de gran valor formativo. Tradicionalmente los contenidos relacionados con la Educación Artística tenían una finalidad comunicativa y estética. En estos momentos, el estudio de su currículo nos permite cooperar en el desarrollo de capacidades perceptivas, expresivas y estéticas a partir del conocimiento teórico y práctico de los lenguajes visuales. Ello implica que los contenidos que la materia va a abordar preparan para la comprensión y análisis del entorno, social, cultural, natural y artístico. Un entorno configurado como un mundo de imágenes y objetos que se perciben a través de estímulos sensoriales de diferente carácter, especialmente visual y táctil.
El análisis de los valores artísticos y estéticos de la cultura visual , de sus rasgos característicos y distintivos permitirá que los alumnos valoren el hecho artístico como disfrute y como parte integrante del patrimonio cultural contribuyendo a su respeto, conservación y mejora. La investigación sobre la forma debe basarse en el análisis y valoración de las principales manifestaciones arquitectónicas, escultóricas, cerámicas y pictóricas que, a lo largo de la historia, han configurado el rico y variado patrimonio artístico. Un conocimiento profundo y activo de la tradición artística es un elemento decisivo para la comprensión de las manifestaciones creadoras de todos los pueblos y culturas. El tratamiento de las formas tridimensionales y la utilización de secuencias rítmicas y formas modulares en la organización del espacio, el estudio de sus aplicaciones artísticas y su uso en los distintos estilos arquitectónicos permitirá que los alumnos comprendan las estructuras formales que singularizan las manifestaciones populares y cultas  tanto en su vertiente funcional como estética.
La Educación Plástica y Visual:
·         Permite el desarrollo de actitudes y hábitos de análisis y reflexión.
·         Proporciona técnicas útiles para enfrentarse a situaciones diversas.
·         Fomenta el espíritu crítico y la creatividad.
·         Hace posible la captación del lenguaje de las formas, contribuyendo al desarrollo de la sensibilidad.
·         Permite que se pueda llegar a valorar y disfrutar del patrimonio artístico de España y de Andalucía como exponente de nuestra memoria colectiva.
·         Desarrolla la capacidad de abstracción para la comprensión de numerosos trazados y con­vencionalismos.
·         Posibilita la adquisición de destrezas vinculadas al orden y cuidado en los procesos de ela­boración de los trabajos.
La concreción de los principios se plasmará en la búsqueda sistemática de la construcción de procedimientos del siguiente tipo:
·         Análisis y clasificación de lenguajes visuales en el entorno.
·         Identificación y comparación de texturas visuales y táctiles.
·         Descripciones, comparaciones y representaciones de formas.
·         Diferenciaciones y representaciones de matices.
·         Reconocimiento y utilización de distintos soportes y técnicas.
La Educación Plástica y Visual exige y facilita el desarrollo de habilidades relacionadas con el pensamiento científico: formular hipótesis, observar, experimentar, descubrir, reflexionar, analizar, extraer conclusiones y generalizar. También requiere y posibilita el contacto con la naturaleza y la sensibilización hacia aspectos relacionados con la conservación, cuidado y reciclaje de materiales para configurar una obra personal. Todo ello implica una relación clara con las competencias de conocimiento e interacción con el mundo físico,  aprender a aprender e iniciativa y autonomía personal (que implican aprender a trazar proyectos, a funcionalizar recursos, a valorar posibilidades, anticipar resultados y evaluarlos). 
 

No hay comentarios:

Publicar un comentario